La estación Avellaneda cumple 9 años con andenes provisorios: las obras de renovación están frenadas

WhatsApp-Image-2024-06-04-at-18-compressed-2
Read Time:4 Minute, 23 Second

La estación Darío Santillán y Maximiliano Kosteki (Avellaneda) de la línea Roca cumple nueve años operando con andenes provisorios en dos de sus cuatro vías: las obras para la elevación definitiva de las plataformas se encuentran frenadas desde hace varios meses.

Se trata de las plataformas 1 y 2, donde se detienen los servicios de los ramales La Plata, Bosques vía Quilmes y Bosques vía Temperley. La estación, además, es una de las más utilizadas de la línea Roca, ya que permite a los usuarios combinar entre las vías Quilmes y Temperley.

Tal como explicó enelSubtelos trabajos, que habían comenzado en noviembre pasado, se encuentran frenados en el marco de la paralización de la obra pública decidida por el Gobierno nacionala pesar de que cuentan con financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Una demora con historia propia

Las vías 1 y 2 de la estación operan con plataformas provisorias desde junio de 2015, cuando fueron instaladas de cara a la puesta en marcha de los trenes CSR, que comenzaron a circular entonces como servicios semirrápidos entre Plaza Constitución y Temperley y luego, desde julio de ese año, fueron extendidos a Claypole.

En teoría, estas plataformas de madera funcionarían durante poco tiempo: se había previsto su elevación definitiva como parte de las obras de electrificación del ramal La Plata. En el segundo semestre de 2016 se llamó a licitación para la elevación de los andenes de la estación, al igual que en el resto de la línea. Las obras fueron adjudicadas a mediados de 2017 a la empresa Copacre.

A diferencia de lo que ocurrió con el resto de las estaciones, que fueron renovadas e inauguradas por etapas, Avellaneda sufrió importantes demoras: en marzo de 2018 el Ministerio de Transporte rescindió por incumplimientos el contrato de la constructora. Si bien estaba previsto volver a licitar los trabajos, esto no se concretó y el proyecto quedó congelado.

La iniciativa fue retomada recién en 2021, luego de que el Gobierno consiguiera una línea de financiamiento adicional de 130 millones de dólares del BID para terminar una serie de obras remanentes en el Roca, entre ellas la reforma de la estación Avellaneda.

Con este renovado impulso, se llamó nuevamente a licitación en abril de 2022, abriéndose los sobres en el mes de julioFinalmente, en abril de 2023 la obra fue adjudicada a la única oferente que se había presentado en la compulsa, la UTE ATF Construcciones-Construcciones OMI.

Una ilusión efímera

En noviembre pasado, tras años de espera, las obras finalmente comenzaron a ejecutarsetal como informó entonces este medio.

Se montó un obrador en un terreno contiguo a la estación, se instalaron vallados y se avanzó con la elevación de aproximadamente un cuarto del andén 1. Semanas más tarde se tabicaron distintas secciones de acceso al andén 2 y se avanzó con la demolición parcial de algunas instalaciones inutilizadas.

Notablemente, las obras no se vieron frenadas inmediatamente tras el cambio de gobierno y siguieron desarrollándose con normalidad hasta entrado febrero. Esto se debía a que -de acuerdo a lo anunciado entonces-, los proyectos con financiamiento internacional no se verían afectados por el freno a la obra pública decidido por el Gobierno.

No obstante, esto no fue así. Tal como reveló este medio en un informe especialtras la disolución del Ministerio de Infraestructura, la interrupción también se hizo extensiva a todos los proyectos con financiamiento internacional, tanto aquellos que se encontraban en etapa de licitación como aquellos que ya habían comenzado a ejecutarse. Además de las citadas obras de Avellaneda, entre estos últimos se cuentan el viaducto de la línea Belgrano Sur a Constitución y la renovación de vías del ramal Tigre de la línea Mitre.

El panorama se agrava si se considera que el organismo estatal encargado de la gestión del proyecto de Avellaneda -la Dirección General de Programas y Proyectos Sectoriales Especiales (DGPPSE)- se encuentra sin titular desde el cambio de gestióntal como reveló recientemente enelSubte.

Esta situación de parálisis llevó a que se perdiera una oportunidad: entre el pasado 8 y 20 de mayo, los andenes 1 y 2 de Avellaneda quedaron temporalmente clausurados a raíz de las obras urgentes en el viaducto Barracas, siendo los trenes de todos los ramales desviados hacia las plataformas 3 y 4 de la estación. Esta ventana temporal, que en condiciones normales hubiese servido para avanzar con las obras de elevación definitiva de los andenes 1 y 2 sin causar mayores disrupciones al público, fue completamente desaprovechada.

Así las cosas, las obras de Avellaneda continúan inconclusas y el obrador permanece abandonado, a la espera de una decisión oficial que no llega. Según trascendió recientemente, la apuesta del Gobierno sería pedir al BID una autorización para reasignar los fondos aprobados y redestinarlos a otros usos no ferroviarios. Se trataría de una situación análoga a la ocurrida con el crédito que ese mismo organismo otorgó para la renovación de vías y señalamiento y la electrificación del San Martín, cuya reasignación ya fue solicitada con el argumento de que la iniciativa “no es prioridad”.

Fuente: enelSubte

Share on facebook
Facebook
Share on pinterest
Pinterest
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn
Share on email
Email
Scroll al inicio