El gobierno de Javier Milei destina millones de pesos a financiar la presencia de tropas estadounidenses en territorio nacional, al mismo tiempo que mantiene virtualmente paralizado el sistema científico y tecnológico argentino. Según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el Ejecutivo subejecutó el 83% de los fondos destinados al Programa de Promoción de la Investigación y la Innovación, una de las áreas clave para el desarrollo del conocimiento y la producción local.
El informe detalla que, durante los primeros nueve meses de 2025, el gasto total de la Administración Pública Nacional cayó un 31% en términos reales respecto al año anterior, reflejando un ajuste generalizado en sectores sensibles como salud, educación, obra pública y ciencia. En contraposición, se registró un aumento del 35% en la ejecución de la Secretaría de Inteligencia del Estado, mientras los pagos por deuda pública siguen absorbiendo el 9% del gasto total.
Ciencia en emergencia, fondos paralizados
El ajuste golpea de lleno al corazón del sistema científico argentino. El Programa de Promoción de la Investigación y la Innovación está en “virtual parálisis”, según el CEPA, con una caída del 83% de su ejecución.
Otros organismos también sufren fuertes recortes: CONICET (-30%), INTA (-38%), INTI (-45%), CNEA (-44%), CONAE (-19%), SEGEMAR (-30%), SMN (-35%) y la Fundación Miguel Lillo (-26%).
El panorama se completa con la cancelación de proyectos estratégicos como los reactores nucleares CAREM y RA-10, el satélite ARSAT SG1, y la paralización de los programas de la Agencia I+D+i. La inversión pública en ciencia y tecnología se desploma al 0,2% del PBI, un piso histórico, mientras se incumple la Ley de Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología que establecía elevarla al 1%.
Obra pública y educación también en caída libre
La parálisis no se limita a la ciencia. El informe muestra que la obra pública registra caídas de entre el 89% y el 100% en programas de infraestructura, pavimentación y construcción. En educación, se eliminaron programas esenciales como Conectar Igualdad y el Fondo Nacional de Incentivo Docente, ambos con ejecución cero.
Millones para las tropas de EE.UU.
Mientras el ajuste interno asfixia a los organismos nacionales, el gobierno autorizó el desembarco de tropas estadounidenses para ejercicios conjuntos financiados con fondos del presupuesto argentino.
El operativo —cifrado en $60.211.157— será cubierto por la Armada y contempla actividades en Mar del Plata, Puerto Belgrano y Ushuaia. El objetivo declarado es “intercambiar procedimientos y tácticas de entrenamiento entre fuerzas especiales”.
En la práctica, esto implica que el Estado argentino pagará la estadía, la logística y las operaciones de las fuerzas norteamericanas, en un contexto de recorte extremo a la ciencia, la educación y la infraestructura local.
Entre la desinversión y la humillación
Mientras los científicos enfrentan salarios congelados, despidos y laboratorios vacíos, el presidente Milei no duda en calificarlos de “casta” o “canallas”. Organismos como el CONICET, el INTI y el INTA —referentes continentales en investigación aplicada— están hoy al borde del colapso operativo.
La paradoja es brutal: el Estado argentino financia tropas extranjeras mientras abandona a sus investigadores, universidades y centros tecnológicos. En nombre del “ajuste”, el gobierno desmantela el conocimiento nacional para sostener un modelo de subordinación y dependencia.
Fuente: Primereando Las Noticias