Hoy la Casa Rosada es una isla rodeada por tres frentes que amenazan con inundarla, el frente político, con una derrota parlamentaria humillante; el frente interno, con “fuego amigo” que apunta directo al corazón del Presidente; y el frente económico, que ahoga a la producción y al empleo en una agonía que nos trae los peores recuerdos. Vamos a desglosar este escenario, pieza por pieza.
El Congreso, el epicentro del último gran sismo político. La Cámara de Diputados le propinó al oficialismo una derrota categórica: un 12 a 0 lapidario. ¡Doce a cero! Ni el analista más pesimista del gobierno esperaba una paliza de esta magnitud. Fueron dos medias sanciones, cinco decretos rechazados y cinco emplazamientos a comisiones. El mensaje de toda la oposición fue unificado y atronador: “Así, no”. ¿Y cuál es la respuesta del Ejecutivo? La de siempre: la amenaza del veto. El Presidente advierte que vetará cualquier ley que “rompa el equilibrio fiscal”, lo que nos lleva a un choque de poderes. Vetar una ley con tanto consenso es mostrar un profundo desprecio por la política y la democracia, es decir: “No me importa su acuerdo, solo importa mi voluntad”. Una voluntad que, hoy por hoy, parece incapaz de construir la más mínima mayoría.
Pero si la tormenta afuera es intensa, adentro el incendio es voraz. Las declaraciones de la ex canciller, Diana Mondino, son de una gravedad inusitada. Al referirse al respaldo de Milei a una criptomoneda, lo definió sin rodeos: “o no es suficientemente inteligente o es un poco corrupto”. Esto no lo dice un opositor, lo dice quien fue su principal figura en política exterior, una mujer del riñón del proyecto libertario. Es una bala directa a la línea de flotación de la credibilidad del Presidente .
Y mientras se libra esta batalla de poder, en la economía real el panorama es desolador. El gobierno oficializó el cierre de la Secretaría PYME en medio de la recesión más profunda en años. Las PYMES, que generan 7 de cada 10 empleos, enfrentan un combo letal: no venden por la caída del consumo, no pueden financiarse por las tasas de interés, y ahora el Estado les quita la única ventanilla de apoyo. Es empujarlas al abismo. Y aquí se suma una nueva postal que nos retrotrae a las peores pesadillas de los 90. Por bajas en las condiciones sanitarias, Chile, un comprador clave, dejará de importar carne argentina. ¿recuerdadn los 90? La aftosa en hacienda proveniente de Paraguay. Y como si la humillación no fuera suficiente, mientras cerramos una puerta de exportación, abrimos una de importación: crece la compra de carne desde Brasil. Empeoramos la balanza comercial y destruimos la ganadería. Es el mundo del revés.
Ahora, atemos los cabos. El argumento para vetar el apoyo a universidades o jubilados es siempre el mismo: el déficit cero. “No hay plata”. Sin embargo, ¿de verdad no hay plata? ¿O está mal distribuida?. El dinero podría obtenerse si se tomaran otras decisiones, por ejemplo, arancelar la exportación de metales. Miren a Estados Unidos, supuesto faro de este gobierno: para proteger susrecursos naturales, acaba de elevar el arancel a las exportaciones de cobre al 50%. Se protegen. ¿Y nosotros qué hacemos?. A través del RIGI, les bajamos los aranceles a cero a las mineras extranjeras para que se lleven los nuestros. Al mismo tiempo, se le bajan los impuestos a los más ricos, como en Bienes Personales. Entonces, la plata no es que no está. La plata se resigna. Se la perdonan a los ricos y a las multinacionales, y se la niegan a los jubilados y a los estudiantes.
¿Cuál es el plan, entonces? ¿Vetar, pelear y esperar que la recesión se convierta en crecimiento mágico?. El gobierno está acorralado por la política, por sus ex aliados y por una realidad económica insoportable para la mayoría. La casta, quizás, esté mejor que nunca. Pero los que seguro están temblando son los de siempre: los laburantes, los jubilados y los pequeños empresarios que ven cómo su país se les desvanece entre las manos.
Cierro con una duda, Diana Mondino, seguirá siendo parte de LLA?O será la 2 de Schiaretti? En una rara lista Cordobesista que pareciera, se rumorea tendrá a Schiaretti, Prunotto, Mondino y más. ¿Una lista Peronista?
Por Ariel Chiariotti