En medio de la tensa negociación del Presupuesto 2026 y la discusión caliente por la reforma laboral en el Congreso, el gobierno de Javier Milei decidió mover fichas claras: giró $20.000 millones en Aportes del Tesoro Nacional (ATN) a la provincia de Tucumán, gobernada por Osvaldo Jaldo —una transferencia extraordinaria que es, hasta ahora, el monto individual más alto girado a una jurisdicción en la gestión oficialista.
El desembolso se produce justo cuando las provincias plantean sus reclamos por más recursos y por un reparto más equitativo de fondos —tema que también está en el centro de la negociación presupuestaria—, en un contexto donde muchos distritos no recibieron ni un peso en ATN en noviembre pasado, tras meses de ajuste y tensiones con la Casa Rosada.
📌 Un guiño político en plena negociación
La jugada tiene un claro tinte político y estratégico: Jaldo y Tucumán aportan tres diputados y una senadora que son piezas clave para que el oficialismo sume apoyos en la Cámara de Diputados y pueda avanzar con sus iniciativas, especialmente el Presupuesto y la reforma laboral —dos ejes centrales de la agenda de Milei
De hecho, tras el giro, Tucumán pasó a liderar el ranking de provincias que más ATN recibió en lo que va de la administración, superando incluso a Neuquén, que tenía el récord con $18.000 millones acumulados hasta ahora.
⚠️ Reparto discrecional en un contexto de conflicto
El envío de ATN se da apenas después de un mes en el que la Casa Rosada no repartió fondos discrecionales a las provincias, generando malestar y reclamos de mandatarios de todos los signos políticos. Muchos mandatarios provinciales ven este tipo de giros como una forma de premiar a quienes se alinean con la agenda oficialista, en lugar de atender criterios objetivos o necesidades reales de las jurisdicciones.
La tensión por los ATN no es menor: según datos oficiales, el Fondo total disponible suma cerca de $860.000 millones en 2025, de los cuales solo se ejecutó una fracción, dejando un enorme remanente en manos del Ejecutivo.
📊 Entre negociaciones y presiones
Mientras Tucumán festeja el desembolso inesperado, otros gobernadores sostienen que el Gobierno no negocia de manera abierta y federal, sino que ofrece migajas a cambio de apoyos puntuales en el Congreso. Esto genera una sensación de división entre provincias, que ven cómo la negociación del Presupuesto y de otras leyes claves se transforma en un trueque de recursos por votos.
En ese juego, los recursos destinados a ATN parecen más un instrumento de presión política que una herramienta de cooperación federal: el mensaje, según analistas y sectores opositores, es claro: “Acompañá la agenda oficialista o te quedás sin plata”.
Fuente: LPO
