El pastor evangélico Carlos Gebel acaba de hacer su ingreso estelar al escenario político argentino y, como era de esperar, lo hizo provocando una profunda grieta interna en el universo libertario. La jugada no pasó desapercibida, y no solo ha tensionado las filas de los libertarios sino que ha abierto un conflicto con los sectores más tradicionales de los evangélicos.
El apadrinamiento de Carlos Gebel, quien se posiciona como una figura política anti-casta y con un discurso directo sobre la moralidad y la ética tradicional, ha causado un desajuste radical en las líneas de los libertarios. Este nuevo fichaje no solo ha generando controversias dentro de los partidos políticos tradicionales, sino que estremece el equilibrio dentro de la propia coalición de Javier Milei. Los evangélicos que ven en Gebel a una suerte de mesías del pueblo parecen más que dispuestos a darle su apoyo, pero los libertarios más clásicos comienzan a sentirse desplazados por el auge de la “religión política”.
💥 Gebel divide a la oposición: ¿unidad o caos?
Mientras algunos en el espacio de La Libertad Avanza consideran que el pastor puede ser una pieza clave en la movilización de un voto evangélico y moralista, otros, sobre todo figuras históricas de la lucha libertaria, temen que este “salto de fe” tenga efectos secundarios devastadores en la coherencia del proyecto de Milei. Ya desde las primeras movidas de Gebel, sus propuestas y su fuerte énfasis en la “moral cristiana” están generando un choque con el discurso laico que venía dominando la campaña del líder liberal.
El ingreso de Gebel a la arena política pone a los libertarios ante un dilema: ¿dejar espacio para la moral cristiana o seguir con la agenda secular y de mercado? Un dilema que, si no se resuelve rápido, podría costarles más que votos.
⚠️ Un Pastor vs. Los Libertarios Tradicionales
Los sectores más ortodoxos del liberalismo empiezan a alzar la voz contra las alianzas con figuras religiosas, considerando que la inclusión de un pastor evangélico en la política es un desvío peligroso de los ideales de libertad individual y separación de iglesia y estado. Específicamente, la fusión de intereses religiosos con intereses económicos y de mercado crea un caldo de cultivo perfecto para los que critican que la línea divisoria entre fe y política se ha hecho cada vez más borrosa.
A esta tensión se le suma que Gebel, al ser una figura de renombre dentro de la comunidad evangélica, está empezando a sacar votos a otras fuerzas de la oposición. En particular, dentro de los sectores más conservadores del peronismo y la derecha religiosa que se ven obligados a redefinir sus alianzas de cara a las próximas elecciones.
🕊️ El nuevo juego político: Evangelio, mercado y votos
Lo que está claro es que el futuro político de Carlos Gebel puede transformarse en un arma de doble filo. Por un lado, puede atraer al voto evangélico hacia la coalición de Milei, pero por otro, puede dividir la base libertaria y generar nuevas fracturas internas en un espacio que ya está teniendo problemas de cohesión. La iglesia y la política podrían estar por cambiar para siempre en la Argentina.
Aún así, Milei se mantiene en un perfil bajo y sin muchas declaraciones sobre el tema, pero lo que parece claro es que la fórmula de “religión + mercado” podría terminar siendo un combo perfecto para algunos, pero un fracaso rotundo para otros. La pregunta es: ¿cuánto tiempo más el espacio liberal podrá manejarse entre estas tensiones sin que explote todo por los aires?
Fuente: LPO
