El presidente de Brasil anunció la creación de la Oficina de Emergencia de Enfrentamiento al Crimen Organizado.
Lula da Silva, presidente de Brasil, este miércoles habló de la terrible situación que se vive en Río de Janeiro, donde la policía combate fuertemente al narcotráfico y ya dejó un saldo de más de 130 personas muertas.
El mandatario pidió que se combata el crimen organizado de forma que no ponga en peligro a policías ni civiles. Además, anunció la creación de la Oficina de Emergencia de Enfrentamiento al Crimen Organizado.
“No podemos aceptar que el crimen organizado siga destruyendo familias, oprimiendo a los residentes y propagando drogas y violencia por las ciudades. Necesitamos un trabajo coordinado que ataque la raíz del narcotráfico sin poner en riesgo a policías inocentes, niños y familias”, publicó Lula en la red social X, ex Twitter.
Y agregó: “Esta mañana me reuní con ministros de mi gobierno y les di instrucciones al Ministro de Justicia y al Director General de la Policía Federal para que fueran a Río a reunirse con el gobernador”.
En esa línea, Lula informó que “con la aprobación de la Enmienda de Seguridad, que presentamos al Congreso Nacional, garantizaremos que las diferentes fuerzas policiales actúen conjuntamente para enfrentar a las facciones criminales”.
La Comisión de Derechos Humanos de Brasil criticó el operativo policial en Río de Janeiro: “Guerra y barbarie”
La diputada del Partido Socialismo y Libertad (PSOL) Dani Monteiro afirmó este martes que “ninguna política de seguridad puede sostenerse con este baño de sangre”, en referencia a los operativos de la Policía Militar y Civil de Río de Janeiro en el que murieron 64 personas y 81 fueron detenidas por crímenes del narcotráfico.
Como titular de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos y de la Ciudadanía de la Asamblea Legislativa de Río de Janeiro (ALERJ), Monteiro envió cartas al Ministerio Público de Brasil y a la Policía Civil y Militar para exigir respuestas sobre las circunstancias de la Operación Convención, lanzada en la madrugada de este martes.
La comisión legislativa sigue “con extrema preocupación” la escalada de violencia provocada por la megaoperación contra el grupo criminal Comando Vermelho en favelas de Río de Janeiro, explicó Monteiro, quien agregó en un comunicado que “ninguna política de seguridad puede sostenerse con este baño de sangre”.
“Nos enfrentamos a una operación letal sin precedentes. El Estado no puede seguir actuando como si existiera la pena de muerte, ni como si las favelas fueran territorio enemigo o escenario de un espectáculo”, señaló la legisladora, para quien “es grave que el gobernador Cláudio Castro insista en actuar solo, mientras el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública afirma haber respondido con prontitud a todas las solicitudes del gobierno estatal para el uso de la Fuerza Nacional”.
La parlamentaria afirmó que Río de Janeiro necesita cooperación entre las esferas de gobierno, no disputas políticas, porque “la seguridad pública se logra mediante la planificación, la inteligencia y el respeto a la vida, no mediante la espectacularización de las masacres”.
Por eso, la comisión reafirmó su compromiso con la vida y los derechos humanos, “exigiendo transparencia, rendición de cuentas e investigación rigurosa de todos los hechos”.
Durante la jornada el secretario de Seguridad Pública de Río de Janeiro, Víctor Santos, afirmó que la operación fue diseñada con antelación y no contó con el apoyo del gobierno federal.
Al menos 2.500 agentes de seguridad de Río de Janeiro salieron a ejecutar 100 órdenes de arresto. Cuando los equipos llegaron, aún de madrugada, los narcotraficantes respondieron con disparos y quemando barricadas.
Entre los arrestados se encuentra Thiago do Nascimento Mendes, conocido como Belão do Quitungo, uno de los líderes del Comando Vermelho en la región.
Otro capturado es Nicolás Fernandes Soares, identificado como operador financiero de uno de los principales líderes del CV, Edgar Alves de Andrade, conocido como Doca o Urso , según O Globo.
El propio Doca sigue prófugo aún a pesar de la veintena de órdenes de detención que están vigentes en su contra.
Fuente: Noticias Argentinas



