Mientras el país atraviesa una ola de frío polar, el gobierno de Javier Milei dispuso este lunes una nueva suba en las tarifas de gas que pagan los usuarios residenciales. Así quedó plasmado en la Resolución 282/2025 publicada hoy en el Boletín Oficial con la firma de la Secretaria de Energía de la Nación, María Carmen Tettamanti.
Allí, la Secretaría de Energía, dependiente del ministerio de Economía de la Nación que lidera Luis Caputo, habilitó una nueva suba en el precio del gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST), es decir en el costo de producción del fluido.
La nueva suba se aplicará a partir del 1° julio y forma parte del proceso de revisión de tarifas y reducción de subsidios generalizados en el que avanza el gobierno libertario y que impacta de lleno en las economías de la familias de los trabajadores.
Según surge del texto de la normativa, la medida determina los valores a trasladar a los cuadros tarifarios del servicio público de distribución, dentro del marco del Plan Gas.Ar, creado para garantizar la producción federal de hidrocarburos y el abastecimiento interno.
De esta manera cada distribuidora deberá adecuar sus contratos de abastecimiento a los nuevos valores y que los usuarios verán reflejado este cambio en las próximas facturas. La medida alcanza a hogares y comercios de todo el país, con precios que varían según la región y la prestadora de servicio, contemplando diferencias por ubicación geográfica y costos de transporte. En general, los valores se ubican en un rango de 2,90 dólares a poco más de 3 dólares por millón de BTU, con tarifas más bajas en el sur y más altas en provincias del norte y centro.
El esquema de segmentación por niveles de ingresos, en tanto, seguirá vigente. Los usuarios de mayores ingresos afrontarán el costo pleno del servicio, mientras que para los hogares de ingresos bajos y medios se mantendrán bonificaciones sobre el consumo básico, de acuerdo con los topes definidos. Si se superan esos límites, se paga un precio diferencial sin subsidio.
El Gobierno dejó además las puertas abiertas a nuevas subas en los próximos mesesya que la normativa también prevé que los nuevos precios se mantengan sujetos a revisión periódica. De este modo, se busca que la evolución de tarifas acompañe la variación de los costos de producción, transporte y distribución.
La Secretaría de Energía confirmó que las distribuidoras y productoras deberán coordinar la adecuación de los contratos de suministro para que los nuevos valores se apliquen sin demoras. Además, el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) se encargará de verificar que los cuadros tarifarios se ajusten correctamente y de controlar la aplicación de los topes y bonificaciones según cada categoría de usuario.
Fuente: Minuto Uno
