Según la inteligencia artificial la expresión “no dar pie con bola” se utiliza para referirse a alguien que no acierta o no logra realizar una acción con éxito.
Esta parece la situación por la que ha atravesado el gobierno nacional. Desde el escándalo generado con la estafa de la cripto moneda el gobierno pasa de confrontación a confrontación en la que no parece acertar a pesar de la violencia que despliega. Comienza a diluirse el aparente éxito del control de la inflación con un enorme costo social.
Lejos quedaron los tiempos en los que Bullrich y Sturzenegger reclamaban por una inflación que no superaba el 1,5% en el mes. Con una canasta que ha quedado desactualizada el último índice obtenido fue de 2,4%. Absurdas excusas fueron desplegadas: si no se considera el incremento de la carne el índice sería de 1,8%. Es claro que si descartamos lo que no conviene se obtiene el resultado deseado, una falacia descarada.
Con la estafa realizada con el lanzamiento de la cripto moneda $LIBRA por el presidente Milei se ha desatado un escándalo de alcance internacional. Burlas en la prensa extranjera, investigación iniciada por el FBI o el reclamo de los damnificados son hechos que han desdibujado la pretendida imagen exitosa del presidente. Es que quizás el rey está desnudo. La tragedia de Bahía Blanca ha puesto de manifiesto las consecuencias de un Estado Nacional que se desentiende de obras esenciales. Se anunció una pobre contribución de $10.000 millones para la
reconstrucción de la ciudad. Una cifra claramente insuficiente frente a lo necesario. Otra vez la ciudad quedó librada a sus propios recursos y al auxilio que la provincia de Buenos Aires pueda brindar. Esto ha provocado muestras de repudio en ocasión de la visita del presidente Milei a la
ciudad.
La tabla de salvación que el gobierno encuentra frente al naufragio es un nuevo crédito del FMI. Es que parece cierto que nadie escarmienta en cabeza ajena. No advierte la situación endeble en que ha quedado el presidente Zelenski tras haberse embarcado en una guerra con Rusia. Tras la ayuda brindada el imperio reclama su libra de carne. No sólo deja a Ucrania en la estacada (no podía hacer otra cosa sin llevar el conflicto a nuclear) sino que exige la entrega de sus recursos naturales. Con la ayuda de los socios de la entrega el Poder Ejecutivo logró la aprobación del DNU que lo habilita a tomar el crédito. ¿Qué deberemos entregar nosotros?
La defensa de los jubilados en su reclamo de actualización salarial ha generado una violenta respuesta por parte del gobierno de Milei y Bullrich de consecuencias imprevisibles. Por lo tanto el gobierno debió retroceder sobre sus pasos el último miércoles cambiando su táctica represiva.
Táctica que no es menos asfixiante. El gobierno libertario no soporta la libertad. ¿Estamos en presencia de un momento bisagra? Esperemos que al darse vuelta la tortilla la violencia no se desborde. El movimiento nacional debe asumir la conducción respondiendo a los
reclamos populares para lograr una transición en paz hacia tiempos mejores.
Por Miguel Re