En la tercera semana del juicio por la muerte de recién nacidos en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba continúan las declaraciones de las familias de los bebés que lograron sobrevivir a los ataques. María Fernanda Martín, mamá de un niña que quedó con graves secuelas, dijo frente al jurado popular que mientras estaba internada escuchó en otra habitación “hablaba una médica, enfermera, decía que la bebé no respiraba”.
Después de ese episodio, la mujer contó que los médicos ingresaron a su habitación y les informó que su beba que “no tomaba la teta y estaba fría”, según repasó el diario Perfil.
Más tarde, ingresó la médica Adriana Moralez, quien le dijo que habían canalizado a su beba y que “tenía un moretón en la espalda”. El personal de salud le preguntó si había sufrido algún golpe, a lo que ella negó. En ese momento le comunican que tenía “alto nivel de potasio” y que seguiría en terapia intensiva.
Cuando María pudo volver a ver a su beba, notó que el “moretón” era “como una quemadura”. Con algunas sospechas, la madre fotografío cada día la herida: “La quemadura se puso negra, se salió la piel”.
Finalmente, el 22 de junio le dieron el alta médica, aunque siguió yendo al Neonatal hasta el 5 de agosto para las curaciones.
Sobre Brenda Agüero, María declaró que fue la enfermera que ingreso después de que nació la pequeña, y la describió como una persona “amable” y “simpática”. Al finalizar su testimonio, la madre de una de las víctimas destacó que espera que “se sepa la verdad, que hablen, que no oculten más nada”.
Fuente: La Nueva Mañana