En una reciente sesión histórica, la Cámara de Diputados de Argentina dio media sanción a un proyecto de ley que busca combatir la ludopatía online prohibiendo la publicidad de casas de apuestas en medios de comunicación y plataformas digitales. Esta medida pretende frenar una crisis que afecta especialmente a niños y adolescentes, quienes están cada vez más expuestos a los riesgos del juego virtual.
Sin embargo, el debate puso de manifiesto los intereses de ciertos sectores políticos que priorizan la defensa de las grandes empresas por encima de la salud mental de los más jóvenes. Tanto el PRO como La Libertad Avanza (LLA) intentaron bloquear la sesión, demostrando una clara falta de compromiso con una problemática social que demanda atención urgente.
Argumentos y polémicas
Diputados como la conocida terraplanista y cosplayer Lilia Lemoine se posicionaron en contra del proyecto, esgrimiendo argumentos que rozan lo ridículo. Lemoine defendió la “libertad” de las empresas para operar sin restricciones y afirmó que un menor de edad no podría acceder a fondos para apostar, ignorando la evidencia que muestra cómo los jóvenes son una de las poblaciones más vulnerables ante la adicción al juego. Estas declaraciones no solo demuestran un evidente desconocimiento de la problemática, subestimando el problema, sino que evidenciaron un desinterés por abordar la raíz de la crisis.
Un paso hacia la protección, pese a los bloqueos
A pesar de los votos en contra de LLA y las abstenciones del PRO y la UCR, el proyecto fue aprobado con 139 votos a favor. Este resultado refleja el respaldo de varios bloques opositores que priorizaron la protección de los niños y adolescentes frente a los riesgos de las apuestas online y los intereses de las casas de apuestas y sectores financieros.
La normativa prohíbe toda forma de promoción de las casas de apuestas en medios tradicionales y digitales, y propone implementar controles como el reconocimiento biométrico para verificar la edad de los usuarios. Estas medidas son fundamentales para mitigar el impacto de la ludopatía y garantizar un entorno digital más seguro para las futuras generaciones.
Indiferencia frente a una crisis social
El intento de boicot por parte del PRO y los libertarios deja al descubierto su falta de interés en abordar una problemática que afecta a miles de familias argentinas. Su postura evidencia un alineamiento con los intereses de los grandes operadores de apuestas, en detrimento del bienestar de los sectores más vulnerables de la sociedad.
La aprobación de este proyecto es un paso importante, pero también un llamado a seguir vigilantes frente a los intentos de ciertos sectores por frenar regulaciones que buscan proteger a la población del flagelo de la ludopatía.
Fuente: primeriando las noticias