Paros, sabotajes, caños, organización popular, planes lucha de la CGT, puebladas, CGT de los Argentinos, Cordobazo, Rosariazo, Tucumanazo, Juventud Peronista, lucha armada… Todo fue necesario para recuperar la Democracia y para traer a Perón a su Patria.
En el marco de esa heroica resistencia, el 7 de septiembre de 1970 caen en la localidad de William Morris los compañeros Gustavo Ramus y Fernando Abal Medina, integrantes de la Organización Montoneros.
En el velatorio estuvieron presente dos sacerdotes peronistas: el Padre Hernán Benítez, confesor de Evita y Carlos Mujica.
Al despedir sus restos mortales Mujica expresó:
“No puedo sino pronunciar unas palabras de despedida para quienes fueron mis hermanos Carlos Gustavo y Fernando Luis, que eligieron el camino más duro y difícil para la dignidad del hombre”.
“Recuerdo cuando con Carlos Gustavo hicimos un viaje al norte del país, y allí lo vi llorar desconsolado al ver la miseria y el triste destino de los hacheros”.
“Fue fiel a Cristo, tuvo un amor concreto y real por los que sufren, se comprometió con la causa de la justicia, que es la de Dios… Es un ejemplo para la juventud, porque tenemos que luchar para alcanzar la sociedad justa… Que este holocausto nos sirva de ejemplo”.
La lucha popular se prolongó durante dos años y medio más. El 11 de Marzo de 1973 el pueblo argentino acabó con la dictadura reventando las urnas con votos. meses después Juan Perón retornaba de su injusto exilio.
Eterno homenaje a todos los héroes y mártires que fueron parte de esa heroica resistencia.
Por Héctor Amichetti
