ara dejar atrás el estrés de la rutina, muchísimos argentinos optan por lugares cercanos a Buenos Aires para hacerse una escapada y así “desenchufarse” de todos los problemas. Las mejores opciones incluyen parques, lagunas, reservas naturales o atractivos gastronómicos que no podés dejar de conocer.
En este caso, presentamos a Villa Epecuén, un pueblo oculto con un lago que ayuda a la piel. Se trata de un destino turístico sumamente singular, reconocido por sus ruinas.
Qué hacer en Villa Epecuén
Villa Epecuén ofrece varias actividades para sus visitantes. La más destacada es la excursión por la ex-Villa Turística Lago Epecuén, que se destaca por su paisaje y su historia, siendo visitada por miles de turistas cada año.
Además, está muy cerquita de Carhué, localidad que se destaca por contar con ambientes y paisajes muy diversos donde los turistas podrán encontrar todo tipo de ofertas hoteleras y gastronómicas. Dentro de lo más destacado, se encuentra:
- Camping Municipal La Chacra: un inmenso lugar con 50 hectáreas y todas las comodidades.
- Playa Ecosustentable: ideal opción para el verano que incluye un muelle, sombrillas y duchas.
- Museo Regional Dr. Adolfo Alsina: fundado en 1963 fue refaccionado en 2010.
- Centro de Interpretación de la Villa Lago Epecuén: funciona como un museo y es la ex estación del ferrocarril.
- Casa de la Ultima Fortinera: es una de las primeras construcciones de la localidad.
- Avistaje de flamencos: son aves que encontraron en el lago el ambiente ideal para vivir.
- Cabalgatas y Paseos en Sulky.
Además, si uno visita las ruinas, también puede aprovechar para disfrutar de las termas de Carhué, ideales para encontrar paz y alejarse de la clásica rutina gracias al turismo.
Dónde queda y cómo llegar a Villa Epecuén
Las ruinas de Villa Epecuén quedan a 540 km de la Ciudad de Buenos Aires, aproximadamente 7 horas y media de viaje en auto. Epecuén es una localidad del partido de Adolfo Alsina, y además se encuentra a 7 km de la ciudad de Carhué.
Para llegar en auto, se debe tomar la Autopista Ezeiza Cañuelas, luego la Ruta 205 que se transforma en la 65 y, por último, doblar en la 60 hasta llegar a destino. Este lugar es muy concurrido por fotógrafos que suelen encontrar allí la inspiración necesaria para desplegar todo su talento.
Fuente: Minuto Uno
