“Cristina contraataca a Milei: desafíos de la legitimidad, críticas a la gestión y llamado al coraje en la política argentina”.

Después de que Cristina Kirchner hablara en la inauguración del microestadio Presidente Néstor Kirchner, Javier Milei no se quedó callado y respondió con furia a los comentarios de la expresidenta. Sin embargo, Cristina optó por no responder a los ataques del actual mandatario y prefirió hacer una publicación reflexiva en la red social X.

En su publicación, destacó que nadie está desconociendo la legitimidad de origen del presidente, reconociendo la contundencia del voto popular. Sin embargo, señaló que esa legitimidad también necesita respaldarse en la gestión y los resultados. Subrayó que incluso con un menor porcentaje de votos, se puede construir legitimidad en la gestión defendiendo los intereses de la sociedad y asumiendo la responsabilidad de lo que corresponde.

En este sentido, recordó el alto índice de aprobación que tenía Néstor Kirchner al finalizar su primera presidencia, enfatizando en la importancia de la gestión efectiva para ganarse el respaldo de la ciudadanía.

Luego, Cristina atacó a Milei con argumentos similares a los expresados en el acto, cuestionando su celebración del supuesto superávit público del primer trimestre. Apuntó que este supuesto superávit no tiene en cuenta las deudas pendientes, comparándolo con la situación de alguien que, sin pagar las facturas de luz, gas, alquiler y expensas, pretende decir que tiene superávit. Concluyó afirmando que no se puede hablar de superávit si se ignoran las deudas acumuladas.

Cristina Kirchner concluyó su mensaje apuntando directamente a la militancia peronista, instándola a asumir responsabilidades con coraje y claridad de ideas. Destacó que, más allá de buscar la heroicidad, es fundamental reconocer que son hombres y mujeres con responsabilidades especiales, capaces de enfrentar la historia con valentía.

En este sentido, hizo un llamado a la militancia para reclamar a los dirigentes y representantes del peronismo organización, presencia, ideas, convicción y, sobre todo, coraje. Destacó que en la Argentina actual se necesita mucho coraje para llevar a cabo los cambios necesarios. Es una invitación a comprometerse con convicción y audacia en la transformación del país.