La inflación se desacelera, pero motivada por el desplome de la demanda

WhatsApp-Image-2024-04-14-at-12-compressed
Read Time:5 Minute, 15 Second

Las subas promedio de marzo se ubicaron en 11 puntos porcentuales, lo que marca una desaceleración en comparación con el 13,2% del mes de febrero. Inflación mensual alta, sí, pero en descenso tras la megadevaluación y el pico de precios de diciembre. Sin perder tiempo, desde el gobierno afirman que pudieron domar a la bestia. El comportamiento de los precios está por debajo de la expectativa, con lo cual la tendencia de precios a la baja marcará el camino. El principal fruto del plan está a la vista, sostienen.

Otro dato alentador, el promedio de la suba de los alimentos que mide Indec volvió a crecer por debajo de la inflación general. De este modo, durante los primeros tres meses las subas de la comida se ubican apenas por debajo de la inflación acumulada (51,6%). Sin embargo, las subas de los principales alimentos de la canasta básica han incrementado más que la inflación promedio del primer trimestre.

Los productos infaltables en la mesa aumentaron hasta 100% en sólo tres meses

Productos populares infaltables en la mesa casi que duplican a la inflación acumulada hasta marzo, de acuerdo al último reporte oficial de Indec. Es el caso de la leche que lleva en el año 96% de aumentos, seguido por el pan que escaló 89% o las galletas que se encarecieron 73 por ciento en tres meses. La harina, el arroz o la lavandina, claves en la canasta básica, también subieron por arriba del promedio general. 

Del otro lado de la balanza, se destaca el comportamiento del precio de las carnes. Dentro del rubro alimentos, las carnes, de gran peso en la medición de Indec, mantienen subas inferiores a las alzas generales y eso oficia de contrapeso. Sin embargo, esto obedece a una caída de la demanda que deja el consumo en niveles históricamente bajos. Los últimos reportes de la Bolsa de Comercio de Rosario dan cuenta que en solo dos meses el consumo per cápita anualizado cayó 4 kilos respecto a diciembre del 2023.

De modo tal que para aquellas familias de bajos ingresos en donde la compra de la canasta básica tiene un peso significativo, la desaceleración de la inflación es solo una anécdota estadística. Más aún cuando el transporte público, determinante para los ingresos medios y bajos, tuvo incrementos de más del 100 por ciento en casi todo el país, con subas de más del 200% en algunas provincias del noreste.

Para el líder libertario, la inflación “se va a caer como un piano”

Si bien el presidente anarco capitalista esperaba una inflación de “7 u 8 puntos” para marzo, de acuerdo a lo que había declarado en Radio Mitre, al tiempo que anticipaba un largo período para estabilizar los precios, hoy la narrativa cambió. Lo que se dice desde el gobierno es que la inflación “se va a caer como un piano”, de acuerdo a lo que lanzó el líder libertario en Neura Media. Para septiembre u octubre, máximo, la inflación pasaría a ser un tema del pasado, según las mismas palabras del mandatario.  

¿Se apresuran en cantar victoria? ¿Sólo con ajuste fiscal y recesión basta para acabar con un problema tan persistente? Son algunos de los interrogantes que flotan. Pero, sobre todo, el más importante tiene que ver con los fundamentos económicos que permitirían acelerar lo que el presidente decía, sin subestimar el problema, iba a llevarle años. 

El campo: “Nos vamos a sentar sobre los granos”
Sobre esto último, la presidenta de la Sociedad Rural de Rosario advirtió que necesitan un dólar más alto para liquidar. De lo contrario, “nos vamos a sentar sobre los granos”, vendiendo “lo justo, mínimo e indispensable para pagar las obligaciones por insumos y alquileres”. Lo cual pone al gobierno en una encerrona tan compleja como recurrente. Si devalúa, se hace de dólares, pero la inflación sube y se espiraliza; de no hacerlo se queda sin dólares y crece la expectativa devaluatoria. Lo cual se resume en: más inflación o más recesión.

Además, deberá resolver la deuda que contrajo con importadores por más de 5 mil millones de dólares en concepto de importaciones que se realizaron, pero el pago se postergó. Como así también el acuerdo de monedas swap con China que anteriormente descomprimía la oferta de divisas pudiendo utilizarlos para importar al gigante asiático o traer mercancías de otros orígenes, pero con componentes chinos. Hoy, las malas relaciones podrían hacer que los asiáticos pongan fin al acuerdo y quieran cobrar u$s 6 mil millones.

El FMI desembolsaría cuando los equilibrios tengan “calidad”

La disponibilidad de dólares es uno de los flancos débiles del gobierno, máxime cuando el Fondo sugirió que no hará desembolsos hasta que los superávits que muestra el gobierno sean consistentes. La otra vía de financiamiento, fondos privados internacionales, pareciera más cercana siendo el ministro de Economía un conocedor de ese mundo. Sin embargo, no pareciera que Luis Caputo se mueva en ese sentido. Contrariamente, “el Messi de las finanzas”, como lo definió el ex presidente Macri, incurre en el error de hablar en público de lo que desconoce: la economía real y el precio del pan.

En suma, todo indica que la inflación de los próximos meses sufrirá el impacto de los tarifazos y complique la desaceleración mensual que se viene advirtiendo. Respecto al tipo de cambio, de haber un nuevo salto devaluatorio la narrativa del gobierno queda definitivamente burlada por la realidad. Incluso, bajando en abril a fuerza de contracción del consumo, no hay señales de que vaya a resolverse prontamente el problema inflacionario.

¿La historia vuelve a repetirse?

Podríamos estar atravesando un descenso inflacionario como el que experimentó Carlos Menem durante su primer año de mandato. Muchos recuerdan el gobierno del riojano por la estabilidad de precios post convertibilidad, pero previo a domarla hubo vaivenes. Luego de asumir en medio de una hiper entre una inflación mensual de casi 200%, tras un plan de ajuste, bajó la inflación drásticamente. Menos de 40 puntos en agosto, hasta llegar a octubre en 5%.

La historia es conocida, en diciembre de 1989 ya estaba nuevamente en 40% y en marzo superaba 90 por ciento mensual. ¿La historia vuelve a repetirse? Probablemente no. Pero muestra a las claras que una desaceleración como la que se vive, no significa mucho. 

Fuente: La Nueva Mañana

Share on facebook
Facebook
Share on pinterest
Pinterest
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn
Share on email
Email
Scroll al inicio