En el poco más de un mes de Javier Milei en el poder, el presidente usó el tiempo que se conoce popularmente como “luna de miel” para impulsar una serie de medidas de ajuste, achique del Estado y desregulación de la economía que apunta a la clase media y los sectores populares. Este ataque a su base electoral redundó en un rechazo a las medidas, pero todavía no tuvo un impacto mayor en su imagen. Esto lo afirmó un estudio de opinión pública realizado por la consultora Analogías a nivel nacional en el mes de enero.
Según la encuesta, el Presidente tiene una imagen positiva de 49,4%, contra un 44,8% de negativa, mientras que un 5,8% se inclinó por la opción “No sabe/No contesta”. Pese a estos guarismos, los modos de Milei, las medidas y los escenarios que provocan tienen rechazo en el electorado.
Más allá de esto, el sondeo consultó a los encuestados sobre si consideran que Milei tiene actitudes autoritarias. Un 46,4% sostuvo que las tiene, mientras que 41,6% no cree que se maneje de esa forma. Un 12% afirmó no saber la respuesta.
La encuesta también consultó sobre el respaldo que pueden tener una eventual eliminación de las leyes laborales, que fue rechazada por un 56,5%, contra un 25,5% que afirma que está a favor. El 17,7% desconoció qué responder.
En cuanto a la reducción presupuestaria a las áreas de ciencia, tecnología y cultura, un 51,2% se expresó en contra, frente a un 35,4% que se manifestó a favor y un 13,4% que se inclinó por la opción “no sabe”.
Tampoco hubo acompañamiento a la propuesta de eliminar la obra pública en aras de reducir el déficit fiscal. Un 46,9% se expresó en contra de esta propuesta del gobierno mileista, contra un 41,1% que sostuvo estar a favor y un 12% que no supo qué responder.
Respecto a una de las principales propuestas de campaña, la privatización de las empresas estatales, un 48,4% se manifestó en contra, mientras que un 39,6% afirmó estar por la positiva. El 12% restante se inclinó por la opción “no sabe”.
También fue rechazado de plano uno de los hits de la campaña del minarquista, la dolarización, que por el momento no está entre las prioridades de la gestión. Un 53,3% se expresó en contra, un 15,8% a favor y un 15,8% respondió que “no sabe”.
Fuente: El Destape