Alemania se coronó como nuevo campeón mundial de básquetbol, por primera vez en la historia, al vencer este domingo a Serbia por 83-77 en la final del campeonato de la FIBA 2023 disputada en el Hall of Asia de Manila, en Filipinas.
Los germanos alcanzaron su consagración de forma invicta y tras eliminar en semifinales a Estados Unidos, uno de los grandes favoritos que culminó en el cuarto lugar tras caer también frente a Canadá en el partido por la medalla de bronce.
Los alemanes ganaron los ochos partidos que disputaron en la competencia que se desarrolló en sede tripartita (Filipinas, Indonesia y Japón). En la primera ronda, vencieron a los japoneses (81-63), a Australia (85-82) y Finlandia (101-75). La segunda ronda la superaron con triunfos sobre Georgia (100-73) y Eslovenia (100-71).
Ya en cuartos de final se deshicieron de Letonia (81-79), en semis del “Dream Team” estadounidense (113-111) y en la final de Serbia, que también buscaba su primera consagración después de perder la final de 2014 en España.
La leyenda argentina Luis Scola, uno de los embajadores del Mundial 2023, le entregó el premio al mejor jugador del partido al escolta Franz Wagner, quien aporto 19 puntos, siete rebotes y tres recuperos.
El base de Toronto Raptors Dennis Schröder, máximo anotador de la final con 28 tantos, fue distinguido como el MVP del Mundial, una condición que ratificó en los minutos finales con puntos decisivos para garantizar el triunfo.
El número 17 de Alemania mantuvo la diferencia en favor de su equipo con una penetración y dos libres a falta de segundos para consumirse el tiempo.
En contraste, el escolta serbio Marko Gudurik (4 puntos) fue el villano del cierre del partido al desperdiciar tres pelotas que pudieron cambiar la definición. Con 1:19 minutos por jugar, el jugador del Fenerbahce turco falló un lanzamiento de tres puntos que hubiera significado la igualdad en 78.
Luego erró una bandeja que significaba doble y falta con el tanteador 75-79 con 48 segundos por jugar y para completar la desgraciada faena dio un pase fuera de la cancha en la última posesión para su equipo.
Serbia no pudo continuar el linaje exitoso del básquetbol balcánico, ganador de cinco títulos mundiales con la exYugoslavia.
Fuente: La Nueva Mañana