Alberto Fernández entregó a una familia de Tucumán, conformada por los padres y siete hijos, la casa número 50.000 construida por el Gobierno Nacional, durante los dos últimos años en todo el país.

“Siempre digo que no hay momento más gratificante para mí que el momento en que entrego una casa a una familia“, expresó el jefe de Estado en el barrio Manantial Sur, acompañado por el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, y el jefe de Gabinete, Juan Manzur.
Durante la entrega de la vivienda, que se hizo en el marco de su visita a Tucumán donde encabezó el acto por el 206° Aniversario de la Declaración de la Independencia, el Presidente destacó que “tener un techo es tener un lugar donde poder vivir dignamente, donde poder ver crecer a sus hijos en tranquilidad y en paz”.
“Es la posibilidad de ser parte de un barrio para vivir comunitariamente compartiendo”, sostuvo el jefe de Estado, mientras que Presidencia de la Nación reportó en un comunicado que el Gobierno invirtió 110 mil millones de pesos para finalizar la ejecución de más de 55.000 obras paralizadas entre 2016 y 2019.
Asimismo, manifestó que “el Estado tiene que ser soporte para que las viviendas puedan llegar a los que más la necesitan y vivir en condiciones dignas” y afirmó que “para que estas casas puedan existir hace falta el Estado, porque cuando las casas las hacen los bancos se toman créditos UVA y la gente queda hipotecada de por vida”.
El Presidente contó que “burocráticamente era difícil terminar estas casas, hizo falta una ley para poder reconstruir lo que estaba sin terminar” y señaló que este proyecto “fue empezado durante el gobierno Cristina (Fernández de Kirchner), que (Mauricio) Macri decidió no seguir y nosotros vinimos a terminar por los argentinos y argentinas porque ellos la necesitan”.
En otra parte de su exposición, indicó que “hay muchos argentinos y argentinas que necesitan un techo y tenemos que trabajar hasta que cada uno pueda tener una vivienda digna” y destacó que “es el objetivo que nos pusimos y el esfuerzo que vamos a hacer y para eso necesitamos de la decisión de los gobiernos provinciales, como Osvaldo (Jaldo) y de Juan (Manzur), que siempre estuvieron a la par”.
“Estas casas son para los tucumanos y tucumanas, disfrútenlas”, concluyó Fernández.